Estuvieron presentes numerosas personalidades de la vida social y económica de Barcelona –entre ellos Joan Clos, alcalde de Barcelona, Xavier Casas, primer teniente de alcalde de Barcelona, Miquel Valls, presidente de la Camara de Comercio y Navegación de Barcelona, Josep González, presidente de Pimec-Sefes, Bernard Valero, Cónsul General de Francia en Barcelona, Luis Fernández, entrenador del R.C.D. Español- así como más de 250 socios de la Cámara de Comercio e Industria Francesa de Barcelona.
El acto se inició con la intervención de Gérard Signoret, Presidente de la Cámara de Comercio Francesa, que dio las gracias a las empresas Cofidis Hispania, Districlima, Faiveley Española y “La Caixa” por el patrocinio del acto. Subrayó la importancia de las relaciones comerciales entre Francia y España, y en especial con Cataluña gracias a la proximidad geográfica, el potencial del mercado francés y la buena aceptación de los productos españoles en Francia. “Este auge se debe al esfuerzo de muchas empresas y empresarios de ambos lados de los Pirineos. La Cámara de Comercio e Industria Francesa de Barcelona quiere poner de relieve y reconocer la labor de dichas empresas y de sus empresarios con el Prix Pyrénées”.
A continuación fue leída el acta del jurado por el secretario del mismo, Philippe Saman. El cuarto Prix Pyrénées fue otorgado a Puig Beauty & Fashion Group.
“Dicho grupo, con sede en Barcelona, está especializado en la fabricación y comercialización de productos de perfumería y cosmética, así como -desde hace algunos años- en la moda. De carácter familiar, el grupo cuenta, en la actualidad, con 5.000 empleados, posee 10 centros de producción y 40 filiales en 25 países. Su cifra de negocios en el 2002 fue de 925 millones de euros.
Francia siempre ha tenido un rol preponderante en el desarrollo de la empresa que fundó Antonio Puig Castelló en el año 1914. En efecto, desde sus inicios, Puig mantuvo estrechas relaciones con fabricantes de esencias de Grasse, en la Provenza. Años más tarde, representó a diversas empresas francesas de perfumería, entre las que destacan Nina Ricci, Jean Patou y Chanel.
Más adelante, en los años 60, Antonio Puig se propone introducir sus productos en los países del Mercado Común. De ahí surge la idea de crear una empresa en Francia. Con este fin, en 1968, llega a un acuerdo con un diseñador español Paco Rabanne, entonces prácticamente desconocido, para la creación, el desarrollo y la comercialización de sus fragancias. Ante el éxito de Paco Rabanne, se construye –en 1975- una planta industrial propia en Chartres, en el centro de Francia. Esta fábrica sigue operativa en la actualidad. Posteriormente, Puig entra también en el conjunto del negocio de moda de Paco Rabanne.
La siguiente etapa de importancia para Puig en Francia es -en 1999- la incorporación de Nina Ricci, de la que era distribuidor en España desde la década de los 50. Nina Ricci sigue teniendo su fábrica en Ury, junto a Fontainebleau y su emblemática boutique en la Avenue Montaigne.
El más reciente capítulo de la relación de Puig con Francia es la adquisición de los Laboratoires Payot en París a raíz de la compra de Myrurgia. Con esta última incorporación, Puig Beauty & Fashion Group cuenta en Francia con 3 fábricas y más de 750 empleados.
En la concesión de este cuarto Prix Pyrénées, el Jurado ha valorado especialmente la antigüedad y continuidad de la vinculación del grupo con Francia así como el constante afán de innovación, creatividad, y audacia que le permite ocupar hoy una posición de reconocido prestigio en Francia y en todo el mundo.”
El premio fue entregado por Joan Clos, alcalde de Barcelona, a los hermanos Enrique y José María Puig. Este último –muy emocionado- agradeció al jurado del certamen por su elección en nombre de su familia y de todos los colaboradores de Puig Beauty & Fashion Group y comentó la importancia de Francia en la historia del grupo. Como dato significativo señaló que el conjunto de empresas francesas que pertenecen al grupo suponen el 25% de la cifra de negocio del mismo.
Para clausurar el acto el alcalde de Barcelona resaltó la importancia de crear un espacio de relaciones con el fin de evitar los conflictos. También comentó los esfuerzos que se realizan para mejorar las conexiones entre Francia y España, entre los que destacó el proyecto del tren de alta velocidad (TGV) y el desarrollo de la red eléctrica transpirenaica de alta tensión.