En tal sentido expresó, “inermes, pero plenos de valor civil han impedido la destrucción de sus localidades y defendido la vida de los agentes del Estado”.
Bell Lemus, aseveró que la población civil –de manera categórica- ha expresado que no reconoce legitimidad ni representación en los grupos que al margen de la ley pretenden suplantar la institucionalidad, bajo el terror y la intimidación. Al tiempo remarcó que el conflicto armado, que ya lleva cuatro décadas no ha logrado afectar la cohesión interna de la sociedad, ni la evolución del sistema democrático.
“Lo que estamos padeciendo es una guerra que grupos al margen de la ley, que no representan más del 0,1% de la población, le han declarado al Estado legítimamente constituido y a la sociedad civil», expresó el Vicepresidente.
En otro tramo de su discurso aseveró que en las elecciones celebradas el 10 de marzo la larga tradición histórica del sistema democrático colombiano se fortaleció.
“Los colombianos, una vez más demostramos que preferimos los votos a las balas”, enfatizo la autoridad. Y remarcó que contra la voluntad democrática nada pudo ni las amenazas, ni las intimidaciones.
El Vicepresidente de la nación sudamericana, también formuló un llamamiento a la comunidad internacional a fin de fortalecer la lucha común contra la violencia y el terrorismo que genera el narcotráfico.
“Porque hemos sufrido muerte y destrucción y nunca hemos bajado la guardia en esta lucha, tenemos suficiente autoridad moral para reiterar nuestro llamado a la cooperación y a la solidaridad para combatir esta perversa unión entre terror y tráfico de drogas” señaló.
Aseveró que el narcotráfico ha contribuido de manera determinante en la creciente degradación y deshumanización del conflicto armado interno que vive su país.
“El apoyo de la comunidad internacional será ahora, más que nunca, crucial para el logro de los objetivos de desarrollo y paz en Colombia”, aseguró.
Por ultimo dejo en claro la decisión permanente e inquebrantable del Estado de mantener las puertas abiertas a una solución política negociada del conflicto y afirmó que “con la ruptura de estas conversaciones, (con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo) una opción para la negociación se ha cerrado pero no se ha renunciado a la paz”.
Mónica Escayola