Uno de los contados equipos preparados para dar la réplica a los Mitsus es sin duda el de los Race Touareg de Volkswagen Motorsport, que se ha hecho con los servicios del recordman de victorias en la categoría de coches, Ari Vatanen. El finlandés no se aventura a autodefinirse como el piloto nº 1 del equipo, que también apuesta por la progresión de Giniel De Villiers o por la eficacia probada de Carlos Sainz, autor de cuatro victorias de etapa en su primera participación en 2006: « Desde luego este año estoy mucho mejor preparado que el año pasado, y no descarto luchar por la victoria final ».
El juego de la confrontación de declaraciones encontradas se ha iniciado con la presencia de los primeros espadas en las motos, cuando en el centro de Belem se han dado cita casi simultáneamente los equipos KTM Gauloises y KTM Repsol. Los ganadores de las dos últimas ediciones, Cyril Despres y Marc Coma, claramente favoritos, junto a Isidre Esteve, han entrecruzado algunos mensajitos frente a las cámaras de TV. « Los contadores están a cero », ha dicho el líder del clan de los azules, mientras que Coma, campeón del mundo de rally raids, está dispuesto a dar batalla: « Estoy ansioso por volver a las pistas ».
Tras el desfile de los grandes favoritos para el título de la carrera, mañana será el turno de los « otros » favoritos, Jean-Louis Schlesser, con su nuevo buggy, y sin la inapreciable ayuda de Josep María Servià, y el equipo BMW X-Raid liderado por Jutta Kleinschmidt, y Nasser Al Attiyah, en el que se encuentra José Luis Monterde.