No es, el de las métricas, un asunto cómodo. Los clientes desean los mejores resultados sin cuestionar la eficacia de sus estrategias o la oportunidad de sus productos, los departamentos de márketing se ven en la obligación de complacer al cliente a toda costa y por encima de todo… y en este proceso, todo se desvirtúa.
Existe todo un negocio paralelo en torno a las mediciones fraudulentas en Internet.
Veamos algunos datos oficiales. Según informaba en 2015 ANA (la Asociación de Anunciantes de Norteamérica) el 36% de los clicks que se realizaban en los anuncios online eran falsos. Realizados por robots. El fraude, solo en Estados Unidos, se cuantificaba en 5,2 billones de dólares (5.200 millones de dólares); pero las cifras, desglosadas, son espeluznantes. También denunciaba que eran falsos el 11% de los anuncios estáticos, el 19% de los dinámicos y el 23% de las impresiones en vídeos. (ref. https://goo.gl/os3rca)
El 52% del tráfico entre webs en Estados Unidos es automatizado y por tanto, fraudulento. Se calcula, según el estudio de Google “La importancia de ser visto”, que el 56% de la publicidad online no la ve nadie.
Evidentemente el objetivo de cualquier empresa en Internet es “ser vista”, y aunque Google Analytics no puede garantizar semejante pretensión, si es en estos momentos la herramienta más popular, completa y fiable para saber quién y cuántas personas visitan sus webs.
Publicistas, empresarios y profesionales del marketing andan en la lucha por conseguir esos “usuarios únicos”, que según Iñaki Gorostiza, no son tales, y en muchos casos se olvidan de los valores de sus marcas.
En esta entrevista que les ofrecemos en formato de vídeo/tv, hemos intentado poner blanco sobre negro, en un sector de sectores que moviliza cientos de miles de millones de dólares en todo el mundo.
Sólo hay una manera de que no lo comulguen con datos tuneados. Aprenda a usar las herramientas de medición ¡y cuestione todo lo demás!
Gema Castellano @GemaCastellano