El Grupo Martinon, cuyo propietario Enrique Martinón Armas es gran amigo del ministro Soria, lleva años explotando un hotel de cinco estrellas, ‘El Volcan‘, construido en terreno ilegal en Lanzarote. Alberto Cortina, el ex de Esther Koplowitz, se ha construido un vallado ilegal de dos metros de altura también en el Parque Natural de Cabañeros. Pedro J. el ex de El Mundo, tiró de toda su influencia y amenazas contra Aznar y Zapatero para mantener una privilegiada piscina que había construido para uso privado en terreno público mallorquín. Carlos Sáinz y Ana Obregón colocaron, sin que se les moviera un pelo, el cartel de «prohibido el paso zona privada«, en sendos amarres construidos en el paso de todos. En Canarias, en pleno Parque Natural, una señora, por su cuenta y riesgo, amplía su casa para alojar a sus hijos y sus nietos; y así podríamos seguir indefinidamente.
Solo en Cataluña hay más de 400 urbanizaciones construidas en terreno no urbanizable cuyos propietarios -que ya sabían que cometían ilegalidad- ahora exigen servicios y legalización, con toda su cara dura; y en Andalucía se han detectado más de 1.000 urbanizaciones pirata de gente con tanta cara dura como los catalanes.
Parece ser que la consigna en España, en esto del ladrillo, siempre ha sido «comete la ilegalidad que después te tendrán que legalizar la ilegalidad». Una práctica delictiva que, como siempre, perjudica a los ciudadanos que hacen las cosas bien. Lo triste de esto es que, de todos estos sinvergüenzas, la única que ha dormido dos días en la cárcel ha sido Josefa Hernández, la de Canarias, que ahora sale en las televisiones hablando de daños psicológicos y emocionales de sus nietos, tras ser indultada por el gobierno a toda velocidad; que para eso estamos en campaña electoral.
En algunas prácticas, todos son igual de chorizos. No hay clases sociales. ¡Aquí no se salva ni el apuntador! Y es que ya lo decía Plinio el Viejo. ‘La gente sencilla condena la ambición y a los que amasan riqueza con gran esfuerzo. Sin embargo, alaban a los nobles que se entregan a los placeres carnales y exhiben riquezas expoliadas y saqueadas‘.
Pues eso…
Gema Castellano @GemaCastellano