Después de obligar a hacer el ridículo a Pablo Casado y a Albiols ayer por la noche, se ha llevado una buena bronca del emérito José María Aznar. «Que no se dedique a hacer extravagancias», ha dicho bien cabreado el de las Azores, en clara alusión a la «disquisición que no conduce a parte alguna» del presidente, cuando demostró no tener claro quienes eran españoles y quienes no. «¿Y europeos?», preguntaba entonces, y es que tampoco sabía quienes eran europeos y quienes no. En fin. Una extravagancia, según Aznar.
El Partido Popular se ha dado un batacazo histórico y, a pesar de que Rajoy parece no ser consciente de ello, Aznar tiene bien claro el panorama. «El PP tienen el peor escenario posible», ha dicho. Y le ha descrito la situación a Rajoy, para ver si así despierta del letargo que lo ha tenido ausente y en un plasma durante largo tiempo. «Tu rival de la izquierda queda fortalecido. Tu espacio queda mermado. Los secesionistas van a continuar el proceso. Tu posición está seriamente comprometida». ¡Vamos! Ni Napoleón podría haberle descrito mejor la situación estratégica y política. ¿Pero se habrá enterado Rajoy?
«La primera regla de la política es que pierdes todas las batallas que no das», dice Aznar.
No sé. Josemari es un estratega nato que tuvo que inventarse un arsenal de bombas de destrucción masiva en Irak, para poder montarse una batallita que le diera una página en los libros de historia, pero Rajoy no. A Rajoy estas cosas le parece «disquisiciones». Y mientras tanto, Ciudadanos se lo come por los pies. ‘Ciutadans’, que dice Cospedal para que quede claro a «España entera» en las Generales que es un partido catalán, no vaya a ser que les de por votar a ‘un partido catalán’, -que lista es Cospedal que sabe más por vieja que por diabla-; «Siutadans«, que diría Carlos Floriano.
Menuda debacle nacional. Y mientras tanto, aquí nadie habla de bajar impuestos, de hacer pública la lista de evasores fiscales, de la deuda que ya supera el PIB con creces, de sancionar a las eléctricas y a las petroleras por amañar precios y abusar de los ciudadanos o del ridículo que estamos haciendo en Europa. Esto les importa un bledo. A todos. Pero al Gobierno más. Y es que parece que que está en reestructuración. En quiebra e inmerso en luchas intestinas de alto voltaje. Un auténtico desastre.
Por cierto. Fue usted quien lo nombró, Sr Aznar. Que Dios le conserve la «labia», porque la vista y la intuición, las tiene bien perjudicadas. O Rajoy o Rato. Eligió al primero porque le resultaba más manejable, pero le ha salido «pasota». Pasa de usted ¡y de nosotros! Ya ve
Gema Castellano @GemaCastellano
Foto: Pool Moncloa