¡Pero qué cara más dura! ¿Cómo se puede presentar en el Parlamento con ese discurso triunfalista y cargado con el mochilón de un partido del gobierno que lo avala, plagado de corruptos en ejercicio colocados en puestos de relevancia e intocables en la cárcel, con un pie medio adentro para que no hablen? ¿Y cómo puede defender unas medidas anticorrupción desde la posición de pertenencia a un partido que, dicho por un juez, se ha financiado ilegalmente y ha reformado …
Etiqueta: