Bilbao

Oskar López Ileaña está considerado como uno de los mejores sastres del panorama nacional. Se inició en la sastrería desde muy pequeño: su padre y su madre eran sastres de profesión. Aprendió el oficio en el taller familiar pasando a trabajar para Loewe con tan solo 24 años. Ahí realizó todo tipo de composturas además de encargarse de la sección 'de medida' industrial.

Nació en el siglo XIX, creció durante el XX y ha llegado al XXI, por méritos propios, con un gran prestigio acumulado. El de 'La Sociedad Bilbaína' brilla con luz propia como también lo hace la ciudad que la acoge; una capital que ha despertado el interés mundial por su arquitectura, desarrollo y gastronomía.

Que el Guggenheim se haya convertido en el icono más reconocible de Bilbao y, por ende, en el museo más conocido no implica que sea el único; aunque sí es el último… de momento. Lo que sí es, hay que reconocerlo, una joya en sí misma; de hecho, hay a quien le gusta más el continente que el contenido. Pero, gustos a parte, la realidad es que, en Bilbao, los museos exhiben ante los ojos del visitante un abanico de posibilidades que van desde los orígenes del hombre a la modernidad.

Con una cocina comprometida con el producto local y el movimiento slow food Bascook se erige en el mejor restaurante de la villa de Don Diego López de Haro. Un restaurante que te envenenará con la magia y el saber hacer de su chef Aitor Elizegi.